domingo, 22 de septiembre de 2019

Crítica Shaped By Fire de As I Lay Dying


Siete años han pasado desde que As I Lay Dying publicaba Awakened.
Los siguientes años fueron terriblemente convulsos para la banda californiana, ya que Tim Lambesis entraba en prisión en 2013 dejando el futuro en el aire. Sus cuatro compañeros formaban Wovenwar en lo que parecía el fin de As I Lay Dying, dejando atrás a Lambesis. El vocalista era liberado a finales de 2016 y en sus perfiles de redes sociales dejaba evidencias de su intención de retomar su exitoso proyecto. 
Tras muchos meses de rumores, As I Lay Dying sorprendía en verano de 2018 con "My Own Grave" y el regreso de la formación clásica. Más tarde anunciarían la publicación de un nuevo disco y los singles irían cayendo. Finalmente, esta semana pudimos disfrutar después de tanta espera, del nuevo trabajo de uno de los grupos referentes del metalcore internacional. 
Shaped By Fire es un disco muy deseado que no dejará decepcionado a nadie. As I Lay Dying vuelven mejor que nunca, con el sonido que les aupó a lo más alto del género. Riffs brutales, acompañados de una ruda parte rítmica y la energizante voz de Lambesis perfectamente combinada con la melódica de Josh Gilbert conforman uno de los mejores álbumes del año. En las letras veremos el arrepentimiento del cantante y la búsqueda de la redención. 
Podemos decir, sin miedo a que nos tachen de locos, que Shaped By Fire es lo mejor que AILD han hecho en sus casi 20 años de carrera. Aunque resulta realmente difícil escoger entre las 12 canciones que componen Shaped By Fire, destacaría "My Own Grave", "Blinded", "Torn Between" y "The Wreckage". 
As I Lay Dying nos ofrecen 45 minutos de diversión para reventar nuestros cuellos mientras escuchamos este excelente disco. Mi valoración final será 9
Os dejo con su primer single "My Own Grave":

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