Comienza su comunicado achacando problemas técnicos irresolubles. Según él, tuvieron que elegir entre seguir tocando sin oírse a ellos mismos o retrasar el evento por horas. Decidieron seguir, pero el hecho de no ser capaz de oír si estaba dando con la tecla le frustró y perdió su serenidad.
Admite que nunca se había sentido tan avergonzado y lamenta haber sacado su rabia en el escenario. Se disculpa apelando a su orgullo en los directos.
Deja también unas palabras para su equipo, que parece ser que han sido despedidos.
Asegura que Five Finger Death Punch seguirán juntos y que el próximo disco saldrá muy pronto.
Se resuelven así las dudas de la continuidad de 5FDP por el momento.
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